Así pues, el
amianto, también conocido como asbesto, es la forma en la que algunos minerales
se cristalizan en la Naturaleza. Los organismos internacionales determinaron
que todos aquellos productos derivados del amianto perjudicaban gravemente la
salud; por ello, en 2005 la Unión Europea prohibió su uso. A pesar de su
riesgo, el amianto fue muy utilizado en la década de los 50-80 por lo que
actualmente se está procediendo a su retirada.
El mayor peligro
que se produce al retirar amianto es la inhalación de sus fibras. Por lo tanto,
cuando se lleve a cabo la eliminación a reparación de materiales que contengan
amianto; o si se está trabajando en lugares que estén contaminados con asbesto,
es recomendable tener en cuenta los siguientes consejos:
1. Lo recomendable sería que la eliminación del amianto fuera llevado a
cabo por empresas especializadas. Esto se debe a que cuentan con profesionales
cualificados y tienen el equipo técnico necesario para diagnosticar y retirar
el amianto de la forma más adecuada.
2. En el caso en el que no fuera posible que se llevara a cabo por personal
especializado, ha de tener en cuenta que en primer lugar se debe analizar la
concentración de las fibras en el aire, señalizar, delimitar y aislar la zona.
Para llevarlo a cabo hay que hacer uso de equipos apropiados de protección:
mascarillas, lentes, guantes…Además de tener en cuenta los controles
ambientales.
3. Se recomienda manipular en mojado la retirada de los materiales para
controlar la exposición aérea. Por lo tanto moje los materiales que vayan a ser
cortados, quitados o taladrados y coloque los residuos en bolsas de plástico
herméticamente cerradas.
4. No haga uso de lana de acero, abrasivos o cepillos de rasquetas
eléctricas para eliminar la cera de un piso de asbesto. Si hubiera que
reemplazar el piso es recomendable colocar el piso nuevo por encima del
anterior. Además es importante que no utilice NUNCA aire comprimido para
limpiar.
5. No beba, coma ni fume en lugar en los que haya fibras de asbesto en el
aire. Además, no barra ni sacude los muebles si hubieran materiales que
pudieran contener asbesto.
6. Una vez retirados los materiales, se debe encapsular los residuos y
transportarlos a un depósito de seguridad específica.
7. Posteriormente, se debe limpiar la zona donde se haya estado trabajando
con asbesto con una esponja mojada.
8. Una vez finalizada la retirada y eliminación de los residuos, los
trabajadores deben de quitarse los trajes especiales en un sitio apropiado y
depositarlos en el lugar oportuno para que se laven los equipos, accesorios y
todos los elementos que se hayan utilizado en el proceso de eliminación del
amianto.